Las chicas del Grupo Show del Masnou reclaman la necesidad de un mecenas para ir al Mundial de Taipei. Lo hacen en una entrevista para http://www.elperiodico.com de la siguiente manera:
"--Para que se haga cargo del tipo de entrevista: la semana pasada sonó el teléfono de la redacción y yo, como siempre, lo descolgué. Era usted que me pedía ayuda. Aquí tiene esta página para contar lo que desee. Aproveche, es un chollo.
--Preferiría que lo contase usted, pues seguro que le sale cien veces mejor que a mí. Está mucho más acostumbrado a estas cosas, seguro.
--Perdone, pero en las entrevistas es más importante lo que cuenta el entrevistado que lo que pregunta el entrevistador, así que dese prisa, porque esto es muy corto.
--Se trata de darnos a conocer. De explicar que, al margen de deportistas de élite, millonarios en audiencia, euros, espectadores, contratos, fama y gloria, además de deportistas también importantes aunque algo menos populares e, incluso, de destacados medallistas olímpicos y paralímpicos, estamos nosotros, aquellos deportistas auténticamente minoritarios que, por no existir, no existimos ni para nuestras federaciones.
--Perdón, ¿esto es una denuncia, una noticia o una queja?
--Esto es la auténtica realidad sobre un deporte, el patinaje artístico sobre ruedas, donde la protección que nos ofrecen tanto la Federación Catalana de Patinaje como la española es cero pelotero. Pagamos las fichas, pero recibimos muy poco a cambio. Por no decir nada. Ni siquiera un documento que nos acredite como campeonas de Europa que somos, en la modalidad Grupo show, que nos permita lograr determinados permisos en nuestros trabajos, en nuestros colegios, en nuestras facultades, para poder entrenar o competir en los distintos campeonatos.
--Me ha dicho que son 21 chicas, entre 15 y 30 años, que se entrenan cuatro y cinco horas diarias, que se pagan todo el material, el alquiler de las pistas, los viajes, la vestimenta, todo, y no reciben ayuda alguna de las federaciones.
--Somos la élite sin papeles. Nadie nos reconoce a nivel oficial y, claro, ahora queremos ir al Mundial de Kaoshiung, en Taiwán, del 14 al 15 de noviembre, y tenemos que pagárnoslo todo, todo, desde los trajes hasta el avión, la estancia y la manutención durante casi diez días.
--¿Por qué les niegan la ayuda?
--No es del todo una negativa. Las federaciones dicen que no representamos a selección alguna, que vamos como club. ¡Imagínese, el Masnou, que bastante hace con darnos el nombre! Las federaciones dicen que no pueden ayudarnos y que lo sienten. No pedimos un plan ADO o algo similar, simplemente un documento para poder decir en nuestro trabajo o lugar de estudios que, tal vez, faltaremos algún día o necesitemos aplazar algún examen de oposición o de la facultad en la que estamos.
--Y, ni corta ni perezosa, va y llama a EL PERIÓDICO para ver si le podemos echar una mano.
--De cualquier manera, nosotras vamos a ir, sea como sea. Llevamos ahorrando desde que ganamos el Europeo en Hanau (Alemania) y nos clasificamos para competir en el Mundial. Vamos a ir y punto. No pedimos nada. Si los ahorros no nos llegan, pues nos cuesta más de 3.000 euros a cada una, pediremos un cré- dito, atracaremos a nuestros padres, engañaremos a nuestros novios, pero iremos. Iremos. Lo que queremos es hacer un cántico a la existencia, la valentía y el sacrificio de deportistas que jamás, jamás, jamás salen en los periódicos y, sin embargo, se machacan entrenándose, ya ve, en un patio al aire libre de un instituto, junto a la riera de El Masnou.
--Cierto. ¿Cómo pueden entrenarse aquí, a la intemperie, en el IES Mediterráneo de El Masnou, en condiciones tan precarias?
--Y gracias. No tenemos otro sitio. Y aquí estamos, en verano y en invierno, haga frío o calor. Y, a menudo, bailamos rodeadas de ratas y escarabajos de medida tropical. Hacemos ver que no los vemos y seguimos las 21, hala, dale que te pego. Luego competimos en pistas cubiertas, de mayores dimensiones, de parquet y no de cemento, es decir, en escenarios a los que, en solo un día, tenemos que tomarles las medidas.
--¿Y no se cansan?, ¿no tienen ganas de dejarlo todo e irse a casa?
--Todo lo contrario. Esta pelea nos motiva, nos une más, crea vínculos más estrechos entre nosotras. Amamos el patinaje, nos gusta y, no nos engañemos, al final el esfuerzo tiene recompensa. ¡Somos las campeonas!
--Esto se acaba, lo siento. Pida lo que quiera, igual se lo conceden.
--Necesitamos uno o dos mecenas para ir al Mundial. Nos pueden ayudar con lo que puedan. Tal vez alguien tenga 30 chándales para que vayamos todas vestidas igual. ¡Fenó- meno!, todo eso que nos ahorramos. O nos regalan el alquiler de una pista de parquet cubierta para que podamos redondear nuestra preparación. O nos pagan una parte del billete de avión. O del hotel. Hay mucha gente, mucha, que puede ayudarnos de una manera desinteresada, seguro, y todas esas ayudas serán bienvenidas. Por poco que sea, nos parecerá un mundo. Seguro."
No hay comentarios:
Publicar un comentario